¿de cuántas formas
se puede nombrar una criatura?
humedad en la humedad,
el sudor y la saliva que densa
el polvo y la respiración hedor en los poros
lo que obstruye las fosas aglomeración contagiosa del alógeno
extraterrestres cuya forma es cualquiera menos la nuestra:
volatilidad que purga el suelo
divertículos en vez de estómago, sacos o bolsas
que desvían su oquedad del
órgano
en el universo lo más importante es la palabra “universo”
por albergar no sólo galaxias en galaxias
sino su propia negación en agujeros negros
antes de siquiera haber sido creado decir “mundo”
era decir “vida” al mismo tronar de cuerpos
gases inertes compuestos de carbono
que a millones de años luz de
distancia
habrían de parecer si acaso cactáceas alienígenas:
fósiles provenientes de la inferioridad azul del devónico
en cada escaño del ente vivo ocupan un diminuto lugar
facultad que sólo equiparan tal vez bacterias y protozoarios
su constitución casi etérea implica la capacidad de ser transparentes
entre diminutos átomos de x número de patas/
una subclase de arácnidos que por mucho tiempo
fueron considerados un orden aparte en la ontología de lo pequeño
a simple vista prácticamente invisibles
concentraciones grisáceas
que la pupila pierde fácilmente
mácula en los ojos donde flota el humor vítreo
como si fueran parte de una estructura primaria
donde los humanos alojan ideas en ideas
y las palabras se vuelven
cosas
—Diego Espíritu
Ilustración de Eduardo Ramón Trejo
Diego Espíritu (Guadalajara, 22 de agosto 1990). Parte del colectivo de investigación y creación Arte+Ciencia de la UNAM, así como del colectivo independiente de gestión cultural y producción artística Waxolote Okupa. Autor de Poemas Panks para community managers (Buenos Aires, Santos Locos, 2016; México, Mantarraya 2017).