por Antonio León

Las noches de inauguración del Encuentro Internacional de Danza Contemporánea Entre Fronteras son también las de apertura anticipada del verano en la ciudad de Mexicali. 33 °C en la explanada del teatro universitario se dejan sentir, al otro lado de la vitrina artificial del teatro todos lucen frescos bajo la refrigeración. La maestra Hildelena Vázquez, coordinadora de este evento, da la bienvenida. El público asistente se divide en tres grandes grupos: los que danzan, los que llevan por dentro el movimiento y los que desean encontrar el origen de esta convención primigenia.

   Tras un foreplay verbal lleno de alusiones al ano, a cargo de SinLuna Danza Punk (Mexicali) las tablas están dispuestas para la Companhia de Danças de Diadema con el espectáculo Fuerza Fluída. Esta obra parte de un encuentro con el artista sur coreano Jae Duk Kim, quien también creó la banda sonora mezclando melodías orientales, sonidos de instrumentos tradicionales de Corea del Sur, elementos industriales e interferencias vocales.

   El colectivo presenta una puesta en escena bordada directamente sobre la respiración y el transcurrir de las pulsaciones. A veces minutero, otras tambor, después golpes al viento; once bailarines irrumpen con fuerza en el escenario para ponerse en contacto con todos los planos posibles de la tarde. Pienso en el gran esfuerzo que me ha tomado ponerme de pie esta mañana tras una fiesta lamentable en la que nadie bailaba y en lo poco que parece importarles la fuerza de gravedad y el cansancio a estos artistas, quienes entran y salen del cuadro haciendo gala de coordinación. Al final de la función, algunos niños bailan entre las butacas del teatro universitario y otros hacen movimientos de Tai Chi que aprendieron en algún sueño.

   Sincronía y concentración en una pieza en la que los engranajes son de cálida factura e incluyen visos de danza africana, desplazamientos heredados de Pina Bausch y movimientos de artes marciales. Se ha dicho mil veces que el elemento fundamental de la danza está en la propia naturaleza humana. La  Companhia de Danças de Diadema nos ha presentado esta tarde una hora de puro funcionamiento orgánico, con la respiración y los latidos del corazón.

El Encuentro Internacional de Danza Contemporánea Entre Fronteras continuará hasta el 2 de mayo

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