¿por qué somos tan pocos?

 

 

3-

revelaré los detalles de algo que en sí mismo

carece de importancia. alguien alzando

y bajando el codo mecánicamente, abocado

a mirar de continuo sobre los hombros, sujeto

a las penalidades civiles para que en su legajo

conste: siempre vamos a ir solos por el llano

fustigados por los lobos. para que lo persuadan

de que era amado e indispensable.

un individuo de extrañas tendencias

que duerme con un revolver bajo la almohada

y le agrada pensar que ganó solo la contienda,

que puede cerrar los ojos o volver la cabeza

sobre cuanto mueble hizo impacto en las paredes.

esa clase de indiscreciones personales. e indagar

sobre el repiqueteo de la lluvia en un pulcro

bombín y qué asientos se reservan

para los tullidos.

 

 

10-

¿por qué somos tan pocos? porque perdimos

todas las batallas. en los poemas siempre

muere alguien, lo que no se sabe es dónde.

en un libro toleramos un retrato, un hecho

pródigo y extraño, destinado sólo a la indagación

secundaria de un lector que olvidará qué significó

el orden familiar de un mundo. aunque esté bien

escrito. aunque defina credos personales

o se proponga formular alegatos. por ahí llegan

por correo, mediante amigos, en un talego,

a través del marco detector de metales

de los aeropuertos. igual que con ciertos

recuerdos nos proponemos o prevenimos

para extraviarlos. para leerlos. para escribirlos.

para extraviarlos. estaremos aquí mucho tiempo.

el agreste suelo seguirá aquí y nosotros también.

 

 

14-

el sueño nos corrige y nos ensucia. nadie

se detendrá en tu puerta, nadie te hablará

en voz alta. conservo el corazón bullicioso

de aquel muchacho campesino, su caído reino

y las encías podridas. ligazones afectivas,

legales y sanguíneas. conocimos el fuego enemigo,

los pasos y vados difíciles. te escribo por mi

propia mano. es el marginal destino del embate.

lugares donde no da la luz del farol. vos vivirás

y yo también. sin nada de obstáculos materiales

o estorbos evidentes. si queda algún prisionero

que sea degollado. fuimos poco a poco

empujándonos lejos. tenía pulso y puntería.

con un golpe decidido conseguía centrar

el disparo. he aquí tu historia y la suya,

a cada cual su papel, la frívola esencia.

 

 

—Alberto Cisnero

Selección de poemas tomada de Forma parte de mi guerra (Barnacle, 2019).

 

Alberto Cisnero (La Matanza, 1975) publicó: El límite de la materia (Ediciones Ruinas Circulares,2012 y Barnacle, 2015),Tagsales (Encausto, 2013) , Adiós y hasta pronto ( Dio Fetente, 2013), El movimiento obrero granizado (Barnacle, 2014), Robé un auto para trasladarme a las soledades vivientes (Barnacle, 2015), Drugstore (Barnacle, 2015), Ajab (2016), Oquei, gracias (Barnacle, 2017), Las casas (Barnacle, 2018)  

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